La Iglesia católica que camina en Liberia reúne casi a un 10 por ciento de su población. Somos pocos pero muy bien avenidos. Vivimos y trabajamos como lo que somos, una única familia con un mismo Padre y un mismo corazón.
Las Misioneras de la Caridad tienen una casa donde acogen a todo el que lo necesita. Siempre tienen un numeroso grupo de jóvenes madres con sus bebes, aprendiendo la hermosa tarea de cuidar de un hijo.